El presidente Alberto Fernández se refirió este viernes al caso del jugador de Boca, Sebastián Villa, imputado en la causa que lo investiga por abuso sexual y tentativa de homicidio.

Si bien dijo que era "difícil" contestar sobre la postura del club, por su rol de presidente de la Nación, dejó en claro que ante una situación de este tipo "tenemos que ponernos del lado de la víctimas, definitivamente".

"La sociedad argentina no puede soportar conductas de esta naturaleza, no las puede tolerar", sentenció el mandatario, y remarcó que "esto vale para todos los casos". "No puede ser que seamos tolerantes con este tipo de cosas, el mundo ya no lo tolera, hay un cambio cultural que ha dado el mundo, gracias a Dios", insistió.

El futbolista de Boca es investigado por la Justicia por el presunto abuso sexual de una joven, ocurrido en julio del año pasado en su casa de un country del partido bonaerense de Canning.

Una serie de mensajes que se filtraron en las últimas horas complican la situación del jugador.

La fiscal Vanesa González había citado para hoy a declaración testimonial a la médica del Hospital Penna que atendió a la denunciante  y que le aconsejó realizar la denuncia porque tenía lesiones compatibles con un abuso sexual. La profesional se ausentó alegando un problema de salud.

Esta es la segunda denuncia contra el futbolista colombiano, puesto que en abril de 2020 su ex pareja, Daniela Cortés, lo acusó de lesiones y amenazas, en un caso que ya fue elevado a juicio y que podría resolverse en un proceso abreviado.

Fernández dijo que "la Argentina tiene que ser respetuosa con el género que sea" y que "no existe ninguna posibilidad de admitir o de justificar que alguien por su sexo someta a otro".

El presidente expuso que las políticas de género "tienen que ver con que el mundo ha cambiado". "Las sociedades deben entender que debemos respetar al otro como quiere ser el otro, y que la vida del otro vale tanto como la mía y debemos respetarla y punto", dijo.

"Y que cuando alguien piensa que la mujer es alguien que puede verse sometida al género masculino -continuó-, por favor, esa es una mentalidad de la edad media que en el Siglo XXI no se permite".

"No aguanto más que las mujeres por ser mujeres no consigan trabajo, que ganen menos que un hombre", expresó. Y añadió: "Y estoy hablando de cuestiones laborales, dense cuenta lo que pienso del sometimiento sexual de una mujer por la decisión de un hombre, me da un profundo asco".

Para cerrar, afirmó que "esto no debería ser tema de debate en la Argentina" y que todos "deberíamos estar muy convencidos de que estas cosas no se pueden permitir".