Quién es Daniel Sturla, el único cardenal latinoamericano que podría convertirse en Papa

El cardenal uruguayo, Daniel Sturla, es el único de los 23 representantes latinoamericanos que tendría chances de convertirse en el próximo Papa en la celebración del cónclave el próximo 7 de mayo y suceder a Francisco como máxima autoridad del Vaticano. El purpurado de 65 años de edad practica la ortodoxia en lo relativo al dogma eclesiástico, sin embargo, presenta un marcado interés por lo social que lo emparentó con Jorge Bergoglio durante los 12 años durante los que se extendió su pontificado.

El arzobispo de Montevideo se ubica octavo en el índice de “papabilidad”, un dato incierto que generó rumores entre los fieles del país vecino. Si bien se lo considera un “moderado”, en la Iglesia se lo mencionaba hace años como un “ratzingerniano” por su pensamiento ortodoxo cercano al papa alemán.

El 10 de diciembre de 2011, el papa Benedicto XVI lo nombró obispo auxiliar de Montevideo y titular del camarlengo, la máxima autoridad operativa y visible de la Santa Sede hasta la elección de un nuevo Sumo Pontífice, rol en el que fue consagrado en ese cargo el 4 de marzo de 2012. En tanto que, posteriormente, el 11 de febrero de 2014, el papa Francisco lo designó arzobispo de Montevideo, rol que asumió el 9 de marzo siguiente.

Menos de un año después, el 4 de enero de 2015, fue proclamado cardenal, siendo creado en el consistorio público del 14 de febrero de 2015. Su título cardenalicio es la parroquia romana de Santa Galla.

La cercanía de Daniel Sturla con el papa Francisco y el elogio a su papado
Daniel Sturla, quien tendrá un rol preponderante en el cónclave, definió a Francisco como “un Papa rioplatense, que tomaba mate, que le gustaba el fútbol, lo que lo hacía muy cercano a nosotros”.

En el marco de una reciente entrevista otorgada al portal uruguayo El Pueblo Digital, Daniel Sturla significó: “Yo creo que hay un legado del papa Francisco muy importante, que tiene que ver con ese ser Iglesia en salida, Iglesia de puertas abiertas y con eso poner en el centro la atención pastoral a los pobres”.