Escándalo, gritos y amenazas por la detención de un menor en Caucete

Un disturbio con música y alcohol en una esquina caucetera acabó el último fin de semana en una verdadero escándalo en una comisaría. 

Una policía de la Comunal de Caucete y su compañero fueron apedreados por al menos 10 sujetos. Los persiguieron y lograron apresar a un menor.

A ese chico lo llevaron a la Seccional 9na y al rato llegó su madre y otros parientes. Y lejos de calmar las aguas, la familia del niño montó un verdadero espectáculo en esa sede policial.

Hubo gritos, amenazas e insultos contra toda la guardia policial. Y al final, la madre del menor quedó como principal sospechosa en una causa por hostigamiento, maltrato, amenazas, golpes y escándalo en la vía pública, precisaron fuentes policiales al medio Telesol.

El episodio se supo este martes, pero ocurrió el último domingo en las instalaciones la principal comisaría del departamento del Este.

Altos jefes de la fuerza revelaron que el móvil 10 de la Policía Comunal fue convocado por el 911 al cruce de calles Aberastain y San Martín para resolver un disturbio con gente que bebía y escuchaba música a todo volumen.

En la unidad iba una cabo y el chofer, un civil. Al arribar al lugar se cruzaron con 10 personas, todas con copones con bebidas alcohólicas y las agresiones contra el patrullero no tardaron en llegar.

Así fue como lo apedrearon, explicaron desde la fuerza. La cabo pidió refuerzos al 911 y en minutos llegó un patrullero del Comando Radioelétrico Este al mando de la oficial ayudante Magalí Vera, quien estaba con otra compañera y el chofer.

En la escena atraparon a un menor, de 14 años, y lo llevaron a la comisaría esperando que apareciera su madre. Pero nunca llegó y por órdenes del Segundo Juzgado Penal de la Niñez y Adolescencia llevaron al chico a su casa en el patrullero comunal y lo entregaran a sus padres. 

Allí fueron recibidos por una hermana del menor, que tiene 25 años. Un rato después apareció la madre, una mujer de 42 años de apellido Acosta. 

Según explicó uno de los miembros de la fuerza policial, en cuestión de segundos esa mujer generó un escándalo: "¿Qué le hicieron a mi hijo?", expresó la mujer y en ese momento, el menor simuló un desmayo.

Eso derivó en la furia de la madre: "Los voy a hacer perder el trabajo con mi abogado. Ya van a ver, este es el último día que van a trabajar. Son unos culiados. ¿Cómo le van a pegar a un menor?", dijo la mujer, según quedó asentado en el operativo.

Acto seguido, los efectivos le hicieron conocer sus derechos a la madre del sospechoso y hasta le ofrecieron que ante esa grave denuncia por la presunta golpiza, lo revisara personal médico del hospital departamental y el legista policial. Pero Acosta se negó y manifestó que lo iba a llevar después, según datos policiales. 

Nuevamente, los uniformados consultaron al juzgado sobre cómo proceder ante ese nuevo incidente y en un acta dejaron asentado todo lo que dijo la madre y la negativa de hacer revisar al chico, informaron fuentes policiales. 

Tras esa maniobra, Acosta, el menor y otros parientes insultaron a los policías y hasta los filmaron con sus celulares. 

A su vez, todo el violento accionar de la madre y su familia quedó registrado por una bodycam que llevaba encima uno de los policías agredidos, informaron fuentes policiales.

 Ahora será tarea de un Juzgado Correccional resolver la denuncia que hizo la oficial del Comando contra la madre de ese adolescente.

 
Fuente: Telesol Diario